Stefan, como técnico de
aplicaciones del soporte técnico de Fronius en Austria, ¿qué implica
exactamente su función?
Como técnico de aplicaciones, brindo
soporte a cuentas clave en la puesta en servicio de sistemas de soldadura
robotizada, especialmente en el sector automotor. Mis tareas principales
incluyen crear y optimizar parámetros de soldadura.
Con respecto a WireSense,
¿cuándo y por qué brindaba asistencia al proveedor automotor Magna en ese
momento?
Como técnico de soporte técnico de Fronius
en Austria, Magna Group es uno de mis principales clientes. A fines de 2017, me
asignaron para brindar asistencia a un integrador de robot. Se estaba instalando
una línea de producción para una nueva gama de vehículos. Como parte de esto,
se debían abordar las tolerancias de producción, que podían generar falta de
fusión y, a su vez, mayores gastos en recursos. Ya habían investigado todas las
posibles fuentes de error cuando me llamaron para ofrecer otra visión sobre el
problema. Me di cuenta de que se estaba llegando al límite en todas las áreas,
incluso con nuestro extremadamente tolerante arco voltaico; ya no había más qué
dar.
¿Cómo Fronius ayudó a
resolver este problema?
En casos como este, es necesario
simplemente aceptar desviaciones mínimas en la posición del componente. Estas
tolerancias también se permiten en el diseño. No obstante, Magna Group siempre
busca mejorar sus sistemas de producción en todas las áreas. Entonces, ahora se
trata de asegurar que el robot encuentre con fiabilidad el borde de la lámina
superior de la junta de solapamiento, a pesar de la desviación. Como trabajé en
investigación y desarrollo de Fronius, sabía que habíamos llevado a cabo
pruebas exitosas anteriormente, que utilizaron la señal de contacto de la
fuente de poder TPS/i inteligente para buscar el borde. En ese momento, nos
preguntábamos si podíamos posicionar todo el conjunto como un solo producto
para el mercado de soldadura, pero no seguimos con la idea. Después, conversé
con mis compañeros de investigación y desarrollo y rápidamente instalamos un
prototipo en Magna.
El producto WireSense no
es muy tangible, ¿cómo podemos imaginarnos este prototipo?
Magna me puso en contacto con el técnico
del integrador de robot, en cuyo sistema se conectaría nuestro sensor de
alambre. Luego, nos encontramos en las instalaciones de producción de Magna, en
Graz, donde pudimos completar el trabajo juntos en un solo día. Básicamente, integramos
un repertorio específico de señales de TPS/i en el controlador del robot. Al
hacerlo, le dije al técnico los puntos temporales en los que el robot debería
activar el modo de enseñanza y cuándo se espera la señal de contacto. Todo lo
demás es un proceso técnico bastante simple.
A partir de allí fue posible: si fijábamos
una operación de búsqueda hacia la lámina superior y, entonces, la señal de
contacto se emitía desde el TPS/i, se había detectado el borde.
¿Y así nació WireSense?
Bueno, en ese punto, solo lo llamábamos una
función de búsqueda de borde. Pero la precisión de posición absoluta
resultante, que debería reducir la repetición de trabajos de Magna a cero,
reveló la necesidad de tener un producto como este. Como todo resultó tan bien
en Magna, mis compañeros de investigación y desarrollo estaban muy interesados
en extender el alcance funcional. Por ejemplo, también se evaluó la señal de
altura emitida por el TPS/i, lo que hizo posible determinar el gap.
Es difícil comprender la
genialidad de este descubrimiento inicial o entender quién tuvo el papel más
importante: el fabricante del robot o Fronius. ¿Cómo ve la relación y qué llevó
en última instancia al desarrollo del producto?
Creo que el factor decisivo, el espíritu
inventivo, está claramente en Fronius, debido a la señal de alta precisión
mediante CMT Ready. ¿Y cómo todo esto se convirtió en un producto?
Todas las funciones posibles hoy en día ya
eran conocidas para los desarrolladores, mucho antes de instalar el prototipo
en Magna. Hace tiempo ya existía el deseo de convertir a WireSense en un
producto vendible, que tuviera un manual y fuera fácil de usar. La tarea del
desarrollador también era lograr que esto fuera claro y entendible para los
responsables de las decisiones en Fronius y la gerencia de productos. Hacer un
argumento de ventas interno, por así decirlo, que indicara qué era prometedor y
valiera la pena llevarlo al mercado. Por supuesto, cuando hay una prueba de campo
tan exitosa, con un cliente importante como Magna para impulsarla, esto
facilita el proceso interno y prepara el camino.
La tecnología de
WireSense parece ser increíblemente simple. Entonces, nos podríamos preguntar
si el descubrimiento vale la inversión. ¿Lo han cuestionado y ha tenido que
justificarlo?
Si deseas vender WireSense, debe ser un
paquete coherente. Claro que no podemos simplemente regalar la idea y dejar que
otros aprovechen el posible negocio.
En primer lugar, se deben tener en cuenta cuáles
otras opciones (además de WireSense) tienen nuestros clientes para resolver
esos desafíos de soldadura robotizada. Normalmente, estos toman la forma de
equipos de medición óptica, que pueden costar diez o doce mil euros. También
debemos analizar qué tan rápidos y robustos son, y cuánto mantenimiento
requieren los sistemas de la competencia. Así que nuestra solución Fronius
comparativamente barata, pero de alta precisión, se ve justificada en todos los
aspectos, y se pone en marcha el producto.